Palacio del conde de Villagonzalo
Fichas tomo 1
San Mateo (Calle), 34
Mejia Lequerica (Calle), 2
Santa Bárbara (Plaza), 2 bis
1ª reforma : Antonio Ferreras Posadillo : 1916 (P y Co).
2ª reforma : Ignacio de Aldama Elorz : 1932 (P) 1933 (Co).
Se denominó erróneamente durante algún tiempo palacio del conde de la Unión de Cuba, que era el tutor de su verdadero propietario, el conde de Villagonzalo.
Junto al palacio de Zabálburu, de José Segundo de Lema, es uno de los pocos ejemplos de palacios madrileños que responde a la corriente racionalista de la segunda mitad del siglo XIX, ligada con el neomedievalismo y las teorías del arquitecto francés Viollet-le-Duc.
El solar es relativamente pequeño y de forma triangular, lo que origina una planta trapezoidal que permite desarrollar la mayor parte de las estancias al exterior, dejando sólo un pequeño patio de luces en el centro.
En la concepción de las fachadas de ladrillo aplantillado es donde podemos advertir una clara influencia del racionalismo neogótico que rompe con los cánones de la arquitectura academicista mediante la ausencia de molduraciones y órdenes clásicos y en el sincero tratamiento de los materiales constructivos.
Los balcones pareados y los miradores de hierro en las esquinas achaflanadas son los elementos más destacables.
En 1933 fue adaptado por Aldama para escuela municipal, uso que mantuvo hasta la década de 1970.
GUERRA DE LA VEGA, Ramón: Guía de Madrid Siglo XIX, Ed. del autor, Madrid, 1993 (2 tomos)
GUERRA DE LA VEGA, Ramón: Palacios de Madrid, Ed. del autor, Madrid, 2001. (2 tomos)CABELLO LAPIEDRA, Luis María: Juan de Madrazo y Kuntz, Arquitectura y Construcción, nº 73, marzo 1900, pp. 65-68
FERNÁNDEZ CASANOVA, Adolfo: Juan de Madrazo y sus obras, Resúmenes de Arquitectura, nº 3, 1900, pp. 31-37