ARQUITECTURA DE MADRID

Residencia de Personas Mayores. Fundación de Dª Fausta Elorz

Fichas tomo 2

Posición en mapa
Fecha
1909
Otras denominaciones

Residencia de Personas Mayores

Resumen histórico arquitectonico
: Daniel Zavala Álvarez : 1909 (P) 1910-1914 (O).
Ampliación pabellón : s.d.c. : 1940-1950 (s.i.).
Rehabilitación y reformas : Carlos Aguilar Oliván : 1991 y ss. (O).
Protección
No
Descripción formal

Su origen se enmarca dentro de las fundaciones benéficas que, sin ánimo de lucro, se erigieron en el Ensanche durante la Restauración y, concretamente, en el de Salamanca, constituyendo en éste una de las tres principales hoy existentes, junto a las más antiguas del Colegio del Loreto y del Pilar.

En este caso se debe a la voluntad de la opulenta dama de origen navarro Dª Fausta Elorz, con el fin de realizar en una manzana completa un asilo de ancianas y una escuela de niñas dentro de un mismo contenedor, que permitiera disfrutar en común de la Capilla y ser regentadas por una sola comunidad religiosa, las Hijas de la Caridad, sin menoscabar su funcionamiento independiente.

Zavala propuso una solución con un cuerpo central cuadrangular de tres niveles, que integrara en el inferior el ingreso, a través de una escalinata, el vestíbulo, sala de espera, portería y un núcleo de comunicación principal, y en el segundo las habitaciones de las religiosas.

Detrás dispuso la iglesia, también panteón de la fundadora y sus progenitores, de planta de cruz latina, una sola nave y ábside recto, concebida, como era usual, en estilo neogótico, con bóvedas de crucería sobre soportes compuestos adosados a los paramentos y, entre ellos, ventanales ojivales con vidrieras policromadas.

Tres pabellones avanzados de dos pisos y a cada lado del cuerpo central, dos hacia el fondo y uno hacia el acceso, completan la composición simétrica de la planta, uniéndose por una larga galería acristalada, rematada en sus extremos por escaleras.

En el exterior, las pautas son neomudéjares, con sobrias paredes de ladrillo recocho visto sobre zócalo de piedra, con variadas decoraciones en el primer material, en líneas de imposta, pilastras, antepechos, etc., destacando en el conjunto los piñones escalonados del cuerpo central y de los laterales.

Transformado en cárcel de mujeres durante la Guerra Civil, fue, al finalizar ésta, la de hombres, donde estuvieron el dramaturgo Antonio Buero Vallejo y el poeta Miguel Hernández, que aquí escribió algunas de sus más célebres composiciones.

Con los años, en parte de su solar se levantaría un edificio de viviendas y sufriría algunas ampliaciones, como el pabellón para comedor, poco armónico con el resto, que se adosó en la parte posterior en la década de los cuarenta.

En la actualidad, la residencia mantiene su primitivo carácter asistencial, bajo la gestión de un patronato fiel a los deseos de la fundadora, que persigue su completa recuperación y restauración.