Viviendas para D. Valentín Ezquerra

: Luis Ferrero Tomás , Francisco Javier Ferrero Llusiá : 1919 (1º P) : Luis Ferrero Tomás : 1920 (2º P) 1920-1923 (O).

Realizado un primer proyecto por los dos Ferrero, padre e hijo, cuando ya había sido concedida la licencia de construcción, y probablemente iniciada la obra, se decidió efectuar algunas modificaciones en planta, como la forma de los patios, aunque se respetó su emplazamiento, y también en alzado, los nuevos más estrictamente regionalistas, de todo lo cual acabó responsabilizándose solo el primero.

No obstante, la composición general resultante sería atribuible a ambos: un volumen de nueve pisos, semisótano, bajo, entresuelo, principal, cuatro superiores y ático, éste en parte ocupado por el torreón esquinero.

Interiormente se divide en dos sectores a izquierda y derecha del eje central de acceso, uno con dos viviendas por nivel y el otro solo con una, respectivamente, los cuales se organizan en torno a dos amplios patios y se comunican independientemente con sus propias escaleras principales, semejantes y de tres tramos, además de ascensor, siendo común en cambio la de servicio.

Ésta, como las cocinas y demás habitaciones secundarias, se ubican hacia la medianería posterior, creando galerías o corredores que facilitan la relación entre las zonas vivideras y la circulación horizontal y vertical.

La distribución y tipología de las piezas responde a la de los edificios residenciales destinados a la clase medio-alta del Ensanche Salamanca.

Al exterior muestra un lenguaje nacionalista, semejante al del Hostal Embajada de la calle de Santa Engracia, obra contemporánea y de los mismos arquitectos, con pilastras de fábrica de ladrillo visto aplantillado y gran riqueza cromática y estructural, mezclándose colores, materiales y texturas con cuidada ponderación, siendo espléndida la rejería de hierro forjado.

En el frente principal es digno de mención el cuerpo central, concebido como un retablo superpuesto y diferenciado del fondo, ornamentado con pilastras y hornacinas y coronado por un hueco enmarcado por volutas, estípites y frontón de inequívoco signo neobarroco.