Viviendas para D. Ramón Muñoz

A partir de un hotel particular en estilo francés con mansardas de bella traza -cuyo autor se desconoce-, Domínguez Espuñes realizó sucesivas ampliaciones hasta engullir ese núcleo inicial en un edificio de viviendas de seis plantas que envuelve la construcción original.

Durante un tiempo fue el edificio más alto de esta calle flanqueada por una caótica amalgama de casas y tiendas de uno o dos pisos.

Es una construcción con pretensiones de vivienda burguesa céntrica, que resulta notoria en su emplazamiento, pero que se delata por su apretada escala y economía de materiales.

Su estilo ecléctico indefinido se acentuaba con un cupulín sobre cornisa volada que remataba el torreón de esquina, y que ya no existe, como tampoco están los faroles que ornamentaban la balaustrada del ático, lugar de residencia del promotor de la obra.