Previsión Española

Antigua Previsión Sanitaria Nacional

: Manuel Ignacio Galíndez Zabala : 1940 (s.i.).

Aunque dificultada la visión frontal por el frondoso arbolado y la estrechez de la calle, llama la atención este edificio entre medianerías por su monumentalidad, por otra parte propia del momento político, la cual logra con sus proporciones y, especialmente, por la adopción de pautas compositivas clásicas, esto es, la división vertical en cuerpo central y laterales, todos en el mismo plano, y horizontal en gran basamento, sutilmente retranqueado, al igual que el ático, y sobre aquel un orden gigante, friso y cornisa.

Sin embargo, la decoración se ha reducido al máximo, hasta la abstracción, resultando un frente de gran pureza y equilibrio, aun cuando compositívamente rígido, en el que los intercolumnios se resuelven con vidrio, a modo de gran muro cortina, y el dicho friso no es más que la monótona repetición de los huecos cuadrados del piso sexto, agrupados en el centro y aislados en los extremos.

Esta serenidad exterior no se reproduce en la organización de la planta, libre por su estructura porticada, en cuyo eje central se dispone la escalera principal, curva y entre dos ascensores, y detrás un patio cubierto, alrededor del cual se distribuyen los despachos.

En definitiva, Galíndez optó en este edificio de oficinas por una imagen desornamentada, que la desvincula de las propuestas historicistas que predominaban en la década de los cuarenta y constituyeron el llamado Estilo Imperial o Nacional, resultando extraña, no obstante, en el conjunto de su producción, aun cuando suponga una evolución con respecto a otras obras anteriores, como el Banco de Vizcaya de Madrid, al adoptar abiertamente los supuestos del Movimiento Moderno.

No fue un punto de inflexión, sino una excepción por las circunstancias, al compararla con proyectos posteriores, en los que retomó su lenguaje habitual.

AA. VV: Manuel I. Galíndez 1892-1980, Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro, Bilbao, 2000