ARQUITECTURA DE MADRID

Parque de las Avenidas

Fichas tomo 2

Fecha
1956
Resumen histórico arquitectonico

: Francisco Echenique Gómez , Luis Calvo Huedo : urbanización 1956 (P); edificaciones 1957 (1º P) 1964 (2º P) 1957-1970 (O).

Protección
No
Autores
Descripción formal

A raíz de la Ley del 15 de julio de 1954, que crea las Viviendas de Renta Limitada y nuevas medidas, gestionadas por el Instituto Nacional de la Vivienda, para incentivar la iniciativa privada en la política residencial y social, surge el más importante núcleo urbano del Barrio de la Guindalera, el Parque de las Avenidas, promovido por la Compañía Inmobiliaria Organizadora del Hogar (CIOHSA).

Los terrenos sobre los que se asienta se enclavaban en el valle del Arroyo Abroñigal, actual M-30, y al Sur de la recién trazada Autopista de Barajas o Avenida de América, cuya posición y facilidad de riego explica su primitivo destino, la agricultura y, especialmente, la floricultura.

Tras salvar las reticencias de los hasta entonces propietarios, se logró la adquisición y urbanización de unas 40 has.

que debían acoger más de cuatro mil viviendas de Renta Limitada, finalmente apenas tres mil, acometidas en sucesivas fases y de distintas categorías, en función de su superficie y su destino social, las diversas escalas de la clase media.

La autorización para la transformación de la zona la concedió la Comisaría de Ordenación Urbana de Madrid el 30 de julio de 1956, con la condición de no superar la densidad de 5,6 habs./m2 y reservar un 35% de su superficie a zonas verdes, lo que no se cumplió, reduciéndose hoy apenas al 22%, mayoritariamente concentrada al borde de la citada M-30, más por la falta de idoneidad de este sector para la edificación, dada su acusada pendiente, que por cualquier otra circunstancia.

Se trata, en cualquier caso, de una gran operación urbana que sirvió de referencia para otras de cierto nivel, realizadas en Madrid poco después, incluso con la denominación de Parque, aun cuando este nombre sea más bien un eufemismo.

Echenique y Calvo ordenaron el conjunto en torno a un gran eje no rectilíneo, la Avenida de Bruselas, que resultaba de enlazar la calle de Azcona con la Avenida de América, a lo largo del cual dispusieron vías paralelas y perpendiculares según un esquema reticular no regular, a las cuales, como a las plazas de encuentro, curiosamente bautizaron con nombres de capitales europeas que comienzan por la letra B, a excepción, quizás intencionadamente, de la Plaza de Venecia.

Las manzanas se comenzaron a construir a partir de 1957, adaptándose a las alineaciones aprobadas, estando constituidas por bloques en H, U o T adosados, de 5 a 10 niveles de altura y con 2 a 4 viviendas en cada uno, divididas las de 1ª y 2ª categoría en sector principal y de servicio, aquel con iluminación y ventilación al exterior y éste hacia patios interiores.

En cambio, los bloques de 3ª categoría, atendiendo a las prescripciones del Instituto Nacional de la Vivienda, se organizan en dos crujías, con 5 pisos y 2 viviendas en cada uno y sus frentes mayores paralelos a la dirección Norte-Sur.

En las fachadas, de cierta diversidad, también en función de su categoría, predomina el uso del ladrillo visto, aun cuando en algunas se alterna con paramentos enfoscados para evitar la monotonía, así como con las terrazas de gran vuelo, hoy muchas cerradas, lo que lamentablemente ha afectado a la homogeneidad y armonía del conjunto.

Siguiendo el ejemplo del Norte de Europa, y con el fin de reducir la contaminación, se dotó de manera novedosa a todo el grupo de viviendas de un sistema único de calefacción con su propia central térmica, el cual, a pesar de las indudables ventajas, acabó provocando problemas de coordinación que han ido originando la paulatina independencia del mismo por parte de sus usuarios.

En cuanto a los comercios, éstos se situaron en los bajos de la Avenida principal, destacando las manzanas de una y otra acera al Sur de la Plaza de Venecia, con altos soportales.

La gran carencia del Parque de las Avenidas son, además de los espacios verdes, los equipamientos necesarios para tan elevada población, pues no cuenta con locales para el ocio, la cultura o simplemente la asistencia sanitaria.

No obstante, se había reservado un solar para cine junto a la Plaza de Venecia, finalmente ocupado por la Iglesia Parroquial de San Juan Evangelista, obra proyectada por el mismo Echenique en 1968, y otros para actividades docentes, aunque donde se había planteado un colegio femenino se levantó finalmente en 1973 la otra parroquia del Parque, la de San Bonifacio.

Faltan igualmente plazas de aparcamiento, en garaje y superficie, y un plan de descongestión del tráfico de la Avenida de Bruselas, transformada en importante vía de comunicación del Este de la ciudad, lo cual ha desbordado y alterado su proyectada capacidad, además de la apacibilidad del lugar.

Bibliografía. Artículos de Revista

AGUILAR PIÑAL, Francisco: La Guindalera-Parque de las Avenidas, AA.VV.: Madrid. Madrid: Espasa-Calpe, 1979, tomo III, pp. 981-1000

GARCÍA DE ARCE, Soledad y DOMÍNGUEZ, Victoria: Ladrillus versus hormigón: Arquitectura religiosa en el Parque de las Avenidas y Buenavista, Universidad y Sociedad, nº 8-9, prim.-otoño 1984, pp. 115-120