Barrio de Nueva Esperanza

Sobre una urbanización previa trazada por un amplio equipo de arquitectos, que dividió la accidentada topografía del solar en cuatro grandes manzanas, la Cooperativa Virgen de la Esperanza encargó a Antonio Camuñas y su hijo la construcción de un barrio formado por 3.393 viviendas, que los arquitectos repartieron en sólo dos tipologías diferenciadas: 156 bloques de cinco alturas y 20 torres exentas de diecisiete, para garantizar la unidad del conjunto.

Los primeros reúnen tres pisos de tres dormitorios por planta, dispuestos en hélice en torno a la escalera de acceso, que presentan la singularidad de ofrecer unas terrazas en esquina de planta cuadrada, como verdaderas habitaciones al aire libre que prolongan los salones aunque en la actualidad han sido casi todas cerradas .

Además ofrecen unos testeros ciegos que permiten enlazarlos de diferentes maneras en grupos de dos a diez portales, creando una gran variedad de espacios intermedios, desde plazas duras a jardines y calles quebradas que se adaptan fácilmente a los desniveles y a la sinuosa traza de las vías de tráfico.

Por su parte, las torres, enfoscadas en color claro para contrastar con el ladrillo visto de los bloques, presentan cuatro pisos por planta organizados en torno a un núcleo vertical central y con pequeñas variantes en su disposición, que se reflejan al exterior en unas interesantes fachadas de carácter escultórico, singularizadas por la variedad de huecos y volumetrías.

PLAN: ... Parcial de Ordenación Urbana de la zona de actuación del núcleo de Canillas, Madrid, Hogar y Arquitectura, nº 60, sep.-oct. 1965, 2-10