Iglesia parroquial de San Miguel Arcángel

No es conocida con exactitud la fecha de fundación de la parroquia, si bien en documentos del siglo XV ya se menciona la existencia de esta iglesia parroquial de la antigua villa de Fuencarral dedicada a la advocación de San Miguel.

En el lado sur del interior del atrio de entrada se encuentra una lápida datada en 1556.

Se conoce que, originalmente, la iglesia tenía su entrada en el lugar donde hoy se encuentra el presbiterio, estando la cabecera situada al este, probablemente acabando en un ábside de forma ochavada como revelan los chaflanes del actual cuerpo de atrio.

En 1770, atribuyéndose su dirección al arquitecto Ventura Rodríguez, se realiza una gran obra de ampliación y reforma que obedece a la imagen actual: nave basilical con crucero y capillas laterales, una de las cuales, la del Cristo de la Vera Cruz, adquiere enorme presencia.

El techo de la nave central es una bóveda plana apoyada en escocias laterales con nervadura corrida y central donde se forma una cúpula rebajada ciega, mientras las naves laterales están cubiertas con bóveda de crucería entre los arcos que van de los muros exteriores a las columnas graníticas de orden toscano.

El arco fajón de medio punto donde acaba la nave da paso al altar mayor, quizá obra de Ventura Rodríguez.

Se inserta así en el espacio un gran crucero con acceso desde el fondo de las naves laterales, que retrasan el presbiterio y el altar al fondo, en una solución de cúpula de crucería con linterna y bóveda de cañón.

El retablo barroco que presidía el presbiterio se destruyó durante la Guerra Civil.

Al atrio del edificio, espacio transformado desde el original y de igual anchura que la propia nave central, se superpone un coro al que se accede desde la escalera de la torre campanario adosado a su lateral sur.

Se asoma a la nave desde un arco de medio punto en una interesante inversión que explica ese otro aire del espacio que se tiene al dar la espalda al altar.

En las naves laterales existen una serie de capillas con altares adosados a los muros, sucesión que se interrumpe en el segundo tramo de la nave sur con la Capilla del Cristo de la Vera Cruz, una edificación adosada de planta en cruz de cúpula con tambor sobre pechinas.

En el mismo lateral sur se encuentran la sacristía, con acceso junto al crucero, y una entrada desde el exterior en el cuarto tramo.

Junto al muro norte existe un espacio porticado, hoy cerrado por sus tres lados.