Vivienda unifamiliar en la Piovera

José María de Lapuerta Montoya y Carlos Asensio Galvín: 2001 (P) 2001-2002 (O)

Partiendo de los condicionantes impuestos por una parcela casi cuadrada entre medianeras, con fuerte desnivel hacia el Sur y acceso principal por una avenida de intenso tráfico en el costado opuesto, los arquitectos decidieron construir una vivienda que se cerrase a las orientaciones más desfavorables para abrirse al mediodía, aprovechando su ventajosa posición elevada sobre su entorno.

Así, construyeron un edificio prácticamente cúbico, de 10'3 x 10'7 x 10'4 m, con tres paredes casi ciegas de hormigón armado -apiconado para sacar a la vista el árido de "mármol" rojo alicante que le da un tono tostado- apenas "agrietadas" por unas estrechas ventanas verticales enlazadas por las esquinas, que iluminan espacios secundarios como aseos y rellanos de escalera, y por la cristalera del vestíbulo.

Por contraste, la fachada al mediodía se presenta como un paramento vítreo sólo interrumpido por grandes jardineras prefabricadas de hormigón unidas por bandejas de "trámex" que proporcionan cierta protección solar, complementada por la plantación de árboles caducifolios de pequeño porte que aportan sombra en verano y dejan pasar la luz en el invierno, y que desde el interior producen la impresión de encontrarse dentro de un jardín, compensando parcialmente lo exiguo del solar.

Colaboraron en el proyecto Francisco Gil Ortega, Paloma Campo Ruano, Victoria Alburquerque Oliva, Juan Francisco Robles y Charlotte Schoepen.

OBRA: ___ reciente. Ciclo 2003-2005 , Fundación Cultural COAM, Madrid, 2006