Sede central de ENDESA en Madrid

Paradigma de instalación corporativa cuya función es también la representación, este edificio es el mayor de los ubicados en este parque de oficinas surgido junto a la M-40, y su situación de remate del conjunto invitaba a un esfuerzo de diseño al que el equipo pluridisciplinar responsable del proyecto no quiso renunciar.

"Ver y ser visto" parece ser el lema del proyecto.

Estas dos notas, su dimensión y su afán de singularidad, junto con la voluntad de conseguir una alta eficiencia energética y de sostenibilidad, marcaron el desarrollo del conjunto.

Así, en este impresionante edificio de casi 60.000 metros cuadrados, el cristal es el protagonista.

En efecto, el conjunto se articula en dos grandes piezas longitudinales y paralelas alrededor de un gran patio cubierto que funciona como espacio de transición y de regulación entre el interior y el exterior del edificio.

Tendido junto a la arteria de circunvalación de Madrid, la marcada dimensión horizontal de esta fachada parece una respuesta al importante tráfico de vehículos que cada día discurre por delante del conjunto.

De hecho, el edificio parece cobrar vida en su extremo, al quebrar su fachada y el volumen general del conjunto, en un intento por asomar su pesada fisonomía a la pequeña escala del tráfico, para lo que los arquitectos plantearon un forzado y espectacular voladizo de 30 metros de luz que cumple, sin lugar a dudas, el objetivo de singularizar la pieza.

La fachada trasera paralela a la descrita anteriormente adquiere otra escala, mucho más urbana, en la medida en que se pliega alrededor de una serie de patios abiertos con zonas ajardinadas que aumentan su desarrollo y pretenden un aumento de la calidad ambiental de los espacios que se vuelcan a esta orientación.

Finalmente, el diseño de la cubierta, dispuesta como una segunda piel frente a la acción solar, con piezas motorizadas que permiten regular la luz y el soleamiento de los espacios interiores en cada estación del año, así como el sistema de protecciones de fachada, tienen como objetivo conseguir un alto control del clima interior.