Grupo de Usera de la Obra Sindical del Hogar

Adaptación a la topografía, negación de la calle tradicional y búsqueda del mejor soleamiento, además de la prohibición de patios cerrados impuesta por la Comisaría de Urbanismo, determinan el proyecto.

"Una de las aportaciones claras de los nuevos conceptos urbanísticos a la arquitectura de viviendas es la que constituye la solución de edificaciones abiertas sin patios interiores y la creación de espacios verdes compensados con edificación en altura.

Estas soluciones permiten que con densidad de vivienda elevada se pueda, no obstante, disponer de zonas de recreo, comerciales, escolares o de diversa actividad cívica, desarrolladas en los espacios libres, con lo que se consigue un funcionalismo correcto".

El Grupo está formado por 4 bloques "A" alineados a 45º en Marcelo Usera, de 12 plantas, 5 viviendas/planta y comercio en la baja por S.

Filiberto, eje secundario con una planta de desnivel; 5 bloques "B" de 7 plantas y 4 viviendas/planta, normales a ambas calles; 3 bloques "C" de 4 plantas, 2 destinadas a vivienda, 1 a porche por M.

Usera y otra comercial a S.

Filiberto; y 8 bloques "D" de 5 plantas y 4 viviendas/planta.

Los bloques B, D y C forman manzanas en "U" con plazas abiertas a M.

Usara; una torre con escalera y ascensor sirve de bisagra.

Los restantes D se alinean paralelos a los A, al otro lado del eje viario.

Las viviendas de "renta limitada" y "tipo social" se distribuyen según cuatro tipologías de tres y cuatro dormitorios.

Como ya anticipaba el grupo experimental de Villaverde, la promoción pública abandona un lenguaje "nacional" adaptando el del Moviendo Moderno.

La variedad formal deriva claramente de la función que se asigna a cada pieza y de las diferentes tipologías de vivienda, y trasciende a cada fachada, donde se juega con galerías de acceso y escaleras, exteriores, tratadas con materiales permanentes; huecos, terrazas y paños ciegos, combinando acabados y colores.

Un recorrido por el eje de Usera muestra la riqueza de espacios urbanos y el contraste cromático y volumétrico.

En paralelo Argote realiza una 2ª fase de menor calidad compositiva, 584 viviendas asentadas a media ladera entre M.

Usera, donde sitúa los bloques de mayor altura; S.

Elías y S.

Magín, con los bloques de menor dimensión adaptados a las curvas de nivel.

Dos torres de 12 plantas marcan los hitos del conjunto.

En 1994 concluye un proceso de rehabilitación centrado en instalación de ascensores, nuevos portales, mejora de instalaciones, aislamiento de cerramientos y tratamiento cromático de fachadas, nuevas cerrajerías, petos y tendederos.

Sobre el testero del bloque a Fernández Ladreda se realiza un interesante mural, obra de Fernández Moya, premiado por el Ayuntamiento en 1993.