Colegio Público El Espinillo

El edificio organiza sus distintos espacios sobre una planta irregular -con luces orientadas preferentemente al Este y al Oeste-, donde se distinguen dos partes separadas por un patio interior y un distribuidor central: la zona de dependencias administrativas y comunes, integradas en cuerpos diferentes visibles desde el exterior (dirección, despachos, comedor, gimnasio, etc.), que alberga aulas en las plantas superiores; y un pabellón-aulario independiente, abierto hacia el patio de recreo y las instalaciones deportivas.

Los rasgos básicos de la composición (claridad de volúmenes, preferencia por las líneas rectas y ausencia de concesiones formalistas) demuestran que estamos ante una recuperación intencionada de los principios del movimiento moderno, apreciable también en los acabados (vanos continuos cerrados con lamas orientables y recercados o marquesinas de hormigón visto).

Sólo un pequeño detalle rompe la ortodoxia del conjunto: el marco de un hueco de la segunda planta que sobresale plásticamente del plano de la fachada lateral.

Al otro lado de la zona de recreos, en la cota más baja del solar, se realizó en 2004 una ampliación, consistente en un sencillo pabellón de planta rectangular, cuya distribución sigue pautas similares a las del aulario principal.