ARQUITECTURA DE MADRID
Hotel Monte Real
Fichas tomo 3
Ampliación y reforma: Luis Romero García-Morato: 1985 (P) 1998 (O). 2ª Renovación: S.d.c.: 2006 (O)
El hotel se sitúa en un enclave del barrio de Fuentelarreyna de Puerta de Hierro, área de edificación en altura residencial alto burguesa del NO de la ciudad.
La mayoría de los bloques de viviendas circundantes presentan cierta unidad de lenguaje con el propio hotel, conformando un conjunto de caracteres particulares en su entorno.
El edificio debe su organización espacial a la ocupación óptima de la parcela, en una ladera descendente de fuerte pendiente, preservando tres áreas libres al Sur, piscina y zona deportiva en los extremos, elevados sobre el nivel de la calle y acceso en rampa de apretada disposición ovalada para entrada y salida de vehículos.
El edificio se desarrolla hacia el fondo de la parcela, extendiéndose lateralmente en la calle Vegafría, desde la recepción hacia el patio de luz con celosía del corredor y en volumen curvado en el gran salón.
La planta de geometría no siempre ortogonal, favorece la aparición de patios que en la baja se sirve de los distintos programas de usos y las circulaciones para dislocar sus volúmenes, y en plantas de habitaciones se desarrolla linealmente primero y después en curva o en abanico.
La arista de balcones volados sobre la entrada caracteriza la imagen del edificio, con un cuerpo de paso que articula las alas del edificio.
Un doble núcleo de comunicaciones verticales tangente a la cara norte, se resuelve con un esbelto cuerpo cilíndrico de escalera para clientes con pequeños huecos de luz que acompañan a la espiral.
Del lado soleado, ciega al frente y rasgada en los laterales, la escalera secundaria organiza un área de servicio por planta.
La rotula del vestíbulo pone así en orden dos pasillos de habitaciones, recto y con dos tipos de estancias simples y en dúplex, de un lado, y del otro, curvo y con dormitorios simples a ambos lados, en una elocuente y muy aaltiana distribución que favorece las vistas al campo de golf y las estancias prolongadas.
Las fachadas del edifico responden a la orientación de las habitaciones que se traduce con un marcado carácter horizontal al Sur, con profundos voladizos que por su formalización en anchas bandas generan fuertes juegos de claroscuros, mientras que en la zona posterior las bandas de habitaciones producen series de líneas verticales al asomarse lateralmente al panorama.
MONTE: ___ Real Hotel en la Ciudad Puerta de Hierro, TA. Temas de Arquitectura y Urbanismo, nº 118, abr. 1969, 33-42