Centro Comercial Tirso de Molina

Antiguo Mercado Tirso de Molina

Edificio al borde de una incipiente racionalidad, su alzado delata la sección y revela su identidad tectónica y espacial: secuencia de pabellones seriados cubiertos a dos aguas y dispuestos transversalmente, y estructura con cerchas metálicas que resuelven las intersecciones de las naves y la crujía central que marca el acceso principal y permite la diafanidad y luminosidad interior.

La cuidada fábrica de ladrillo en los recercados de los huecos y en la decoración, sobre la base de escalonamientos en los hastiales de las naves; las texturas pétreas y de ladrillo y la sucesión de hastiales de fachada entre apilastrados de ladrillo de clasicista evocación, remiten este mercado a la secuela ecléctica de la arquitectura industrial en ladrillo de los mercados madrileños de las primeras décadas del siglo XX, tras la huella del propio Bellido a orillas del Manzanares.

Con un aspecto vivaz fiel a sus orígenes, hoy es un centro neurálgico en el barrio, y su horizontal compacidad, sus pregnantes fachadas y el dinámico ritmo de sus cubiertas son una síntesis arquitectónica entendida como memoria inconsciente de la tradición histórica, un monumento urbano de baja intensidad ligado a la vida cotidiana.

BIDAGOR, Pedro: Ordenación del barrio de la carretera de Extremadura, Reconstrucción, nº 2, may. 1940, 34-40