Universidad Autónoma de Madrid

El Campus universitario de la Autónoma de Madrid está situado en una depresión geográfica entre las carreteras de Madrid a Colmenar y la conexión de ésta con Alcobendas.

Es el resultado de un concurso de anteproyectos de arquitectura convocado en 1969, donde aparecen nombres como Antonio Fernández Alba, Javier Feduchi, José Mª de la Mata o Juan Serrano, del que el estudio de los Borobio resultó ganador.

Rectorado y facultades que forman el núcleo de la ciudad universitaria más próximo a la carretera de Colmenar, son ejemplo de una arquitectura de base modular que plantea la ordenación a partir de la sucesión en damero de patios y pabellones de baja altura, con una vía de circunvalación, y sin singularidades ni excepciones, salvo el hecho de que hacia el NO, una línea de pabellones se sitúa al otro lado de esta vía y la salva mediante pasarelas peatonales para conectar con el otro lado del conjunto.

A partir de la rápida ejecución de esta primera fase acabando la década de los sesenta, una ordenación en cuadrícula de parcelas alargadas en la dirección NE-SO transversal a la pendiente, ha ido dando lugar a la aparición de numerosas edificaciones alrededor del grupo inicial: las dotaciones comunes polideportivas al Norte, generales al Oeste junto al apeadero de RENFE, y edificios para nuevas facultades hacia el Este y Sur.

Quedaron sin construir la facultad de Biología de Javier Carvajal de 1975, siendo la finalmente edificada de gran interés arquitectónico por sus galerías acristaladas; e igualmente quedó en proyecto un pabellón de aulas de Antonio Fernández Alba de 1978, a quien se le encargó unos años más tarde la facultad de derecho y su ampliación, arquitectura de caracteres particulares en este entorno, ejemplo de un radical posmoderno de tintes neoclásicos.

Los arquitectos Alfonso Segovia y Miguel García Cardiel intervinieron en la Facultad de Ciencias añadiendo un observatorio astronómico y laboratorios y talleres de investigación, en los años ochenta.

En los bordes del campus y de reciente construcción son los edificios de la escuela infantil Bärbel Inhelder de la Comunidad Autónoma de Madrid, la Residencia y la Facultad de Informática.

Imponente construcción, ésta última, formada por dos cuerpos enfrentados, prismático uno y curvo el otro, que crean espacios intersticiales de gran peculiaridad, algo desasosegante por su probable deliberada umbría que da acogida al Centro de cálculo, aulas libres y salones de actos para toda la comunidad universitaria.

Más al Sur, el edificio de laboratorios del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC destaca por su desarrollo en altura y su cerramiento de color verde de piezas prefabricadas con óculos integrados.