Casa Matías Hernández en la Colonia Diplomáticos
Fichas tomo 3
Javier Carvajal Ferrer: 1976 (P) 1976-1979 (O); Ampliación: 1980 (P) 1980 (O)
Potencia expresiva, elegancia y exultante plasticidad hacen de esta casa un arquetipo de la arquitectura de autor y una síntesis de referentes modelos arquitectónicos salidos de la mano de arquitectos testimoniales como el propio Carvajal, Cano Lasso e incluso Corrales y Molezún, con aquel virtuosismo del "pase corto" con que Santiago Amón hiciera apología y sustancia crítica de las cadencias armónicas y leves de los retranqueos y zigzagueos presentes en la obra de aquellos maestros de los sesenta y setenta.
Cerrada al exterior y abierta al intimismo doméstico interior, con el sensible toque de abstracción racionalista de Javier Carvajal, la vivienda desarrolla una síntesis natural-organicista en blancas bancadas escalonadas, esculpidas a modo de estratos sobre la base de expresionistas franjas de sombra que proyectan volados y densos frisos de hormigón abujardado, cuya rotunda volumetría se suaviza bajo las masas vegetales de las terrazas, casi a modo de jardín colgante -desde un romanticismo subyacente- sobre los plásticos y densos zócalos pétreos de planta baja.
El completo programa de la residencia burguesa de alto estanding se desarrolla con singular y escrupuloso desmenuzamiento funcional en espléndidas plantas que articulan rigor analítico, fuerza, elocuencia, estilo y esmerado diseño de las partes.