Bloque de tres viviendas unifamiliares adosadas

Jesús María García-Valcárcel Muñoz-Repiso y Amaya Patiño Figueredo: 1999 (P)

Es una más de las significadas experiencias de Aravaca (lugar que los mejores arquitectos han tomado como laboratorio de ensayo) que buscan alternativas a la cuestión de las pequeñas agrupaciones de viviendas unifamiliares adosadas en hilera, y lo hace mediante el ensayo de un sistema compositivo basado en la ambigüedad entre la diferenciación de las unidades residenciales y la univocidad de estilos, como si de un solo edificio inseparable se tratara, jugándose en este caso con gran eficacia plástica en el terreno de la alternancia reconocible de texturas entre prismas blancos y masas y superficies de madera de cálidos acabados, así como en el remate de cubiertas en forma abovedada y en revisión de cierto arquetipo de la modernidad funcionalista.

El resultado es este edificio objetual de magnética imagen y de irrepetible singularidad.